A modo de decálogo, comparto lo que aprendí de alguna de esas criaturas fantásticas de la mina que componen nuestro libro Cuentos de Carbón (Mariposa Ediciones).
1. De
El Lampazos, que todo lo que brilla
tiene una parte oscura.
2. De El Agarrapelos, que quien se centra en el cuerpo acaba descuidando a la persona.
3. De Las Yarish, que los sueños solo se alcanzan si se persiguen.
4. De El Diantre Azul, que lo más importante que nos pasa, nos pasa por dentro. Hay que aprender a escucharse.
5. De La Güela, que no es malo esperar. Lo malo es no saber qué.
6. De El Emulón, que un secreto es una verdad que se piensa en voz baja.
7. De El Encañador, que el miedo te persigue como un hijo. Al fin y al cabo, es fruto de tu cuerpo.
8. De El Cortacuerdas, que en verdad no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, pero tampoco sabemos lo que nos hemos estado perdiendo hasta que lo encontramos.
9. De Los Mouros, que la maravilla de la vida asienta en que nada es igual a nada. Todo resulta sorprendente. Basta con mirar.
10. De El Hada Negra, que ame como pueda, ame a quien pueda, ame lo que pueda… En definitiva, que ame siempre sin preocuparme nunca de la finalidad de ese amor.
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