viernes, 29 de abril de 2016

Mi yo voluntario

Los beneficios que la acción de voluntariado ejerce sobre el propio voluntario están sobradamente contrastados: permite su desarrollo y realización personal, conectar e interactuar con personas distintas (tanto sus iguales como otras), desarrollar o adquirir determinadas aptitudes/habilidades/capacidades, mejorar su autoestima y estado de ánimo, sentirse útil ante sí mismo y ante los demás, facilitar la comunicación intergeneracional (en el caso de ejercer ese voluntariado con personas mayores, de las que además pueden enriquecerse de su experiencia)…
Asimismo, determinados estudios científicos han demostrado beneficios directos sobre su salud física y mental, al constatar que la tasa de mortalidad entre las personas voluntarias es significativamente más baja que las de quienes no lo son, incluso cuando se consideran factores como la salud de los participantes. Se ha apuntado también que este tipo de acciones ayudan a disminuir las dolencias crónicas, elevan nuestro umbral de quejas y aminoran los tiempos de recuperación.
Por todo ello puede afirmarse que el voluntario, por el mero hecho de ejercer su labor, tiene más probabilidades de ser una persona motivada, realizada, comprometida, comunicada, preparada, hábil, feliz… ¡y por supuesto, sana!
Mención especial merecían las personas mayores que son voluntarias. Siguiendo las recomendaciones de Naciones Unidas, la UNESCO, la Organización Internacional del Trabajo o la propia Organización Mundial de la Salud, en España se vienen desarrollando diversos programas de integración y participación de personas mayores en actividades sociales muy diversas. Así en muchas ciudades hay mayores voluntarios que controlan las entradas y salidas de niños de los colegios, colaboran en actividades culturales (como guías de museos) o medioambientales (informadores en los parques), comparten piso con estudiantes jóvenes… Y es que esta etapa de la vida puede ser idónea para ello, sintiéndose así más útiles y capaces, a la vez que ocupan provechosamente su tiempo de ocio.
La condición de persona mayor es también un buen motivo para volcarse en esas actividades que de siempre nos gustaron: escribir, leer, interpretar… De igual modo, puede ser un periodo ideal para aprender cosas nuevas o para seguir haciendo a favor de los demás las mismas que se realizaban antes de la jubilación.
Entre nosotros Los Argonautas contamos con varios voluntarios octogenarios, que se implican plenamente en cada objetivo. Acompañan en los paseos a otros mayores que lo pudieran necesitar, actúan en los espectáculos programados, e incluso en el caso de una profesora de Música ya jubilada, enseña canto y baile a otros compañeros de proyecto.
Estamos seguros de que la participación de muchos mayores en alguna actividad como la descrita puede resultar sumamente positiva para su salud y bienestar. Y al tiempo demostrarán con ello una de las premisas elaboradas por el Consejo de Europa: que ninguna persona está imposibilitada por el hecho exclusivo de su edad.

P.D.: Texto que bajo el título Yo, voluntario he redactado para el blog del Proyecto Solidario Los Argonautas -al que pertenezco como psicólogo asesor- con motivo de este 29 de abril, Día Europeo de la Solidaridad Intergeneracional.

miércoles, 27 de abril de 2016

Hasta pronto, Santiago

Creo que el Día del Libro debería celebrarse todos los días. Si bien, tristemente, no deja de ser una casualidad, otro accidente, algún oasis maravilloso en mitad del desierto.
Sé que cada día cierran definitivamente dos librerías en España, que las ventas del sector han descendido casi un 20% en los últimos cinco años, que si no hubiera descargas ilegales -al margen de las pérdidas económicas que conllevan- se generarían casi 25.000 puestos directos de trabajo en el mismo, que el 55% de la población no lee nunca o a lo sumo solo a veces... Y que algún referente de opinión para los jóvenes, como el cantante Melendi, reconoce sin reparos que "jamás ha leído un libro", aunque sí "la prensa porque le parece más entretenida".
En este contexto, acabo de recibir una noticia que ahonda más si cabe en esa sensación. El escritor Santiago Morata anuncia que "después de nueve títulos publicados, ha dejado de escribir", por lo que por un tiempo va a dedicarse a cultivar para sí mismo su segunda pasión: la pintura. Y lo hace de manera serena, con ese realismo en positivo que le caracteriza, aun a sabiendas de que si quisiera volvería a publicar.
Santiago es uno de esos amigos que me ha presentado la Literatura. Empezamos casi al unísono, he leído y reseñado varios de sus libros, compartimos presentaciones en León y Zaragoza, acordábamos fechas en las Ferias del Libro para coincidir en la misma caseta, e incluso tuvo el precioso detalle de que el protagonista de una de sus novelas eligiera como libro de cabecera mi ópera prima, El amor azul marino.
Revisé algún borrador suyo antes de que se editara, le llamé desde Buenos Aires para informarle de que su libro lucía en todas las librerías, escuché emocionado cuando me informó de que una de sus obras sería traducida al ruso, nos recomendamos en los foros... Aunque pueda parecer extravagante, siempre he considerado a Santiago un hermano de Letras. Y quizá, por esas leyes de la consanguinidad literaria, comparto los sentimientos que ahora esgrime, pues -por primera vez desde que escribo- en ocasiones me planteo dejar de luchar contra molinos de viento y ofertar mi tiempo a cualquier otra pasión.
Pero antes, como lector y como persona, quisiera agradecer a Santiago cada una de sus creaciones, respetar -como no podría ser de otra manera- ese hasta luego en positivo y esperar sinceramente que resulte temporal. Aunque jamás nos lea Melendi, la Literatura de nuestros días necesita a escritores como él.

martes, 26 de abril de 2016

El gol de su vida

Me gusta el fútbol y me gusta mucho. Lo admito abiertamente. De hecho, tengo una amiga que siempre me pregunta que cómo alguien tan alemán -por lo de racional- en su trabajo puede ser tan griego -por lo de pasional- en esa afición.
Esta mañana, repasando en un periódico digital la crónica deportiva del fin de semana, disfruté de un vídeo con un gol tan maravilloso que casi resulta increíble. Lo marcó un tal Javi Gómez, del modesto equipo del Socuéllamos, en un partido de la Segunda División B. El jugador templa el balón con el pecho y desde unos 25 metros ejecuta una chilena espectacular introduciendo el esférico por la escuadra, lejos del alcance del guardameta rival. Sin duda, una joya de arte deportivo.
Si este tanto lo llega a firmar Messi, Cristiano Ronaldo, Ibrahimovic o cualquiera de esos dioses del balompié a los que adoramos cada domingo, habría sido titular del telediario y portada indiscutible de la prensa del día... Y por supuesto, habría optado sin atajos al Premio Puskas a la mejor diana que cada temporada otorga la FIFA.
¡Pero no! Ese extraordinario gol es obra de un humilde delantero de un sencillo club... Y por ello, con independencia de su belleza, probablemente no llegará más allá de cierto vídeo perdido entre mil noticias o de una reseña encontrada en el blog de algún aficionado.
Para bien o para mal, el fútbol resulta una metáfora de nuestra existencia. Uno y otra están llenos de pequeñas injusticias que personas que nos decimos justas acabamos consintiendo. Por eso hoy, aun cuando parezca una banalidad ante tantos problemas, reivindico todo el reconocimiento para Javi Gómez y su genialidad. Aun habiendo marcado el gol de su vida, seguramente que el mejor tanto del año en la próxima fiesta FIFA no será para él, sino para Neymar, Bale, Diego Costa o alguna otra estrella similar. Y es que en demasiados ámbitos de la vida, incluido mi querido fútbol, todavía arrinconamos lo realmente valioso para seguir adorando a cualquier vellocino de oro.

lunes, 25 de abril de 2016

En la Semana Europea de Vacunación

Por iniciativa de la Región Europea de la Organización Mundial de la Salud y bajo el lema La vacunación te protege a ti y nos protege a todos, del 24 al 30 de abril se celebra la Semana Europea de Vacunación. Como médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, responsable de un Centro de Vacunación Internacional, hago míos sus objetivos al constatar cada día la importancia de esas vacunas, no solo para la protección de las personas a quienes se les administra, sino también como un acto responsable y solidario que contribuye a un mejor estado de salud para el conjunto de la población.
Por ello, al inicio de esta semana comparto este práctico Decálogo de Vacunas, elaborado por la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria:
1. Protegen nuestra salud.
2. Salvan vidas.
3. Pueden controlar y eliminar enfermedades.
4. Previenen algunos tipos de cáncer y enfermedades degenerativas.
5. La vacunación no es solo cosa de niños.
6. Son solidarias.
7. Son seguras y efectivas.
8. Son un derecho básico.
9. Forman parte de un estilo de vida saludable.
10. Déjese aconsejar sobre vacunación.

jueves, 21 de abril de 2016

De Independencia a Botines

Desde que empecé a escribir, hace poco más de una década, ha habido una fecha en el calendario en la que siempre viví lo mismo. Casi sin darme cuenta, se ha convertido en mi particular Día de la Marmota. Se trata del 23 de abril, luciendo como motivo de fondo la conmemoración del Día del Libro. En esa festividad estuve siempre, mañana y tarde, firmando ejemplares de mis obras en el Paseo de la Independencia, de Zaragoza. Los primeros años, con Amares, la editorial con la que publiqué inicialmente El amor azul marino. Después, en el stand de Librería Albareda.
Han sido diez ediciones entrañables, la mayoría con sol y todas con mucho público. En cada una de ellas he rubricado dedicatorias, charlado con mil amigos, compartido anécdotas con cientos de lectores, sonreído... Y siempre acompañado por ese paraguas naranja que cada 23 de abril también hace lo mismo.
Este próximo sábado, por motivos personales, va a romperse tal tradición. Aunque parte de mí saldrá de nuevo al Paseo de la Independencia -al fin y al cabo, allí estarán mis cuentos-, en esta ocasión no podré ir a Zaragoza. En su lugar, celebraré esta fiesta de la palabra junto a los libreros de León, que se reúnen con sus stands en la Plaza de Botines de esta ciudad.
Sé por experiencia que la magia de la Literatura llega a todos los sitios, al margen de donde uno se encuentre. Por eso, desde aquí o desde allá, ¡feliz Día del Libro!

miércoles, 20 de abril de 2016

El murciélago de colores

Esta era una vez que había un Murciélago que destacaba de entre todos los mamíferos por ser el único que podía volar. Era el más lindo, el más altivo en sus piruetas, el más elegante… Y también el más presumido, hasta el punto de que llegó a solicitar a Dios tener plumas para así convertirse en el animal más hermoso de la creación.
Sorprendido por aquel deseo, el Señor le autorizó a que pidiera a cada ave una sola de sus plumas. Y así lo hizo. De manera que obtuvo una del Pavo real, otra del Flamenco, una tercera de la Oropéndola y así, una a una, de los pájaros más atractivos que sobrevolaban la faz de la tierra.
Poco a poco aquel Murciélago fue adquiriendo un aspecto tan llamativo que atraía cualquier mirada, recordando en sus recorridos la estela del arcoíris. El resto de la fauna estaba deslumbrada por su imagen, dedicándole cientos de piropos. Fue entonces cuando un arrebato de soberbia se apoderó de él.
- Soy el ser más bello de cuantos existen –se repetía a sí mismo-. No hay nadie que ni de lejos pueda parecerse a mí.
A aquella crisis de vanidad le siguieron otras muchas en las que menospreciaba sin recelo a las demás criaturas. Se burló del Gorrión por sus colores tan grises, de los Avestruces por esa silueta espigada, de los Colibríes por tan pequeño tamaño… Sembrando con ello el descontento entre las aves que, precisamente, le habían prestado sus plumas.
- ¡Así nos lo agradece! –se quejaba el Arrendajo.
- ¡Así nos lo agradece! –insistía algún Loro parlanchín.
Aquellas quejas se fueron sucediendo hasta llegar a oídos del Creador, quien decidió llamarle para que rindiera cuentas por su actitud.
Ante tal aviso, el Murciélago pensó que Dios le hacía subir al cielo para contemplar in situ su belleza. De manera que su ego se elevó hasta el infinito, convirtiendo desde entonces sus desplantes hacia los otros en auténtica humillación.
- Siendo tan rastrera, a ti nunca te llamará –le reprochaba despectivo a la Gallina.
Al llegar al cielo y encontrarse en presencia del Señor, comenzó a alardear de nuevo con respecto a su hermosura. De hecho, estaba tan contento, que aleteó y aleteó sin control, desprendiéndosele con el movimiento cada una de las plumas que le habían regalado. Y así, sin apenas darse cuenta, quedó casi desnudo, sin una sola de ellas.
Viéndose en tal estado, cayó en una profunda depresión. Arrepentido y avergonzado descendió a los suelos, refugiándose en una cueva y negándose a sí mismo la visión.
Cuentan que durante unos días llovieron plumas de colores que no quiso contemplar. Y que desde entonces, el murciélago vive recluido en la oscuridad, lamentando aquel comportamiento y añorando lo que un día fue y que nunca más será.

Nota: Versión personal de la leyenda mexicana El murciélago de colores, incluida en mi libro Nanas para un Principito.

martes, 19 de abril de 2016

A propósito de Howard Gardner

Lo afirma Howard Gardner, profesor en la Universidad de Harvard, neurocientífico de primer nivel y autor de la teoría de las inteligencias múltiples: "Una mala persona no llegará nunca a ser buen profesional. Tal vez tenga pericia técnica, pero no será extraordinaria... La excelencia solo se alcanza si vas más allá de satisfacer tu ego, tu ambición o tu avaricia. Y eso exige ética".
Suscribo una a una esas palabras, aunque con ciertas matizaciones que me ha enseñado la vida.
Porque en ella he aprendido que esas "malas personas" pueden alcanzar ciertos puestos de responsabilidad y ser incluso tus jefes. Yo he tenido dos así a lo largo de mis años de profesional. El primero era uno de mis tutores cuando realizaba la especialidad de Medicina Preventiva. Le faltaba corazón y le sobraba codicia. En cierta ocasión, le pillaron llevándose a casa incluso los rollos de papel higiénico que habían dispuesto en su baño. Resulta evidente que alguien así podrá tener mando, mas nunca será un líder.
El segundo fue en su día mi jefe de personal. A priori, cuidaba más las formas... pero en el fondo no tenía empatía alguna, ni diálogo más allá de sus imposiciones.
Curiosamente, ambos poseían una autoestima desproporcionada, creyéndose superiores a no sé muy bien qué, envidiando tus logros en vez de celebrarlos y presumiendo sin tapujos de ser un ejemplo para los demás... cuando si eran ejemplo de algo es de cómo no se debe ser.
Por eso, parafraseando la cita de Howard Gardner, "una mala persona no llegará nunca a ser buen profesional... pero ¡cuidado no sea tu jefe, porque quizá tampoco te lo deje ser a ti!".
Eso sí, hay otra frase de este genial profesor que hago mía sin más precisiones: "Sin ilusión la vida se queda en obligación". Y esa ilusión, nadie nos la podrá quitar.

lunes, 18 de abril de 2016

Comprando en tiendas pequeñas

Aun sin tener nada en contra de los hipermercados o las grandes superficies comerciales, acostumbro a comprar siempre en las tiendas pequeñas de mi barrio. Así, conozco a Zoilo y su stand de ultramarinos, a la señora Teresa con su pescadería, a Rocío en una quesería, a Adelina y sus frutas... En casa me indican que cuando voy de compras tardo demasiado, e incluso un vecino con quien coincidí recientemente al salir de uno de estos establecimientos, me advirtió de que "en el super de la esquina está todo más barato". Puede ser... En algunos productos, ¡no digo que no! Pero desde que sé del esfuerzo a todos los niveles que para estos pequeños comerciantes supone sacar adelante su negocio, he decidido apostar por ellos. Además así se dinamiza la económica local, recibo un trato más personalizado, no suele haber colas, puedo adquirir un género diferente no estandarizado, compro realmente lo que quería comprar, no tengo la sensación de que el precio sea superior -incluso en muchos productos frescos resulta significativamente más barato- y las bolsas salen gratis.
No obstante, hay un extra añadido que guardo en secreto: todos ellos, desde la "A" de Adelina a la "Z" de Zoilo, comparten conmigo alguna de sus vivencias con las que luego hilvano las tramas de cada historia. Así que, ¡cuidado cuando me veas con el carro de la compra!: cualquier cosa que digas, podrá aparecer en mis cuentos.

domingo, 17 de abril de 2016

Ecuador en el corazón

Aun cuando ya tenía escrita otra entrada para hoy, la noticia del terremoto que ha sufrido Ecuador ha borrado sus palabras. Sea mi recuerdo para todos los afectados. Lo hemos sentido mucho. Vaya con él desde aquí nuestro apoyo y solidaridad, junto a estas líneas que precisamente escribí tras otro seísmo, en cuya distribución de las ayudas recibidas pude participar:

"El egoísta tiene un corazón con telarañas. Detrás de cada gesto, aguarda un interés. Nunca entenderá que cuanto menor sea un recurso, mayor es la necesidad de compartirlo... En ningún  momento será capaz de comprender que -por muy cerca que esté- en una situación de crisis, quien no ayuda, estorba... Jamás se explicará por qué cuando el ser humano se cierra en busca de su propia felicidad, nos ponemos tristes... Y será incapaz de resolver que la verdadera generosidad no consiste en darle al otro lo que te sobra, sino en darle aquello que necesita". 

viernes, 15 de abril de 2016

Nuevas metodologías para una educación más humana

El Museo de Arte Contemporáneo de León (MUSAC) es mucho más que un museo. No en vano, ofrece regularmente una programación cultural y educativa de vanguardia, digna de todo elogio.
En este contexto se incluye la actividad Nuevas metodologías para una educación más humana, que se realizará en sus instalaciones durante este próximo fin de semana, organizado por su Departamento de Educación y Acción Cultural, en colaboración con el Centro de Formación e Innovación Educativa de León (CFIE).
Se trata de un curso para el profesorado, que no sea solo de formación, sino también de reflexión y acción para el cambio; que no sea solo una reunión de profesionales cerrada al exterior, sino que conlleve una toma de contacto con las necesidades e intereses de la ciudadanía.
Este curso implica también un posicionamiento de la educación artística con relación a las nuevas tecnologías, en las que la persona es el centro. Todo ello, apostando por un paradigma donde el proceso educativo se identifica con el desarrollo del alumno.
En definitiva, una oportunidad de formación extraordinaria para muchos docentes. Porque como a este respecto señalara acertadamente María Acaso -profesora titular de Educación Artística en la Universidad Complutense de Madrid-, "lo importante en el siglo XXI no será el qué (los contenidos), sino el cómo (las metodologías)". Y no puedo estar más de acuerdo.

jueves, 14 de abril de 2016

En otro cumpleaños de papá

Hoy sería otro cumpleaños de mi padre. La verdad es que ya he perdido la cuenta de cuántos años tendría, pues siempre le recuerdo con los del día en que se fue. A pesar del tiempo transcurrido desde aquel fatídico accidente y de lo mucho que he meditado al respecto, me quedo con la mejor de sus herencias: tanta capacidad de sacrificio, ese tesón por alcanzar cualquier meta (siempre desde el respeto y a pesar de las injusticias que pudieran sobrevenirle), el amor que profesó por su familia... Y por supuesto, esa sonrisa que no se quitaba ni para hacerse la foto del carnet de identidad.
Era su santo y seña, el lenguaje no gestual que aprendí de él y que yo pretendo enseñarle a mis hijos. No en vano, a veces pienso que lo llevamos impreso en nuestro ADN, pues compruebo con orgullo que su nieto tampoco se la quita ni para hacerse la foto oficial del colegio.
¡Felicidades, papá! En este 14 de abril, esas mil sonrisas con las que siempre me despido lucen por y para ti.

miércoles, 13 de abril de 2016

Por un Conservatorio digno en León

En mi familia amamos la Música. El hecho de que mi mujer pertenezca a ese mundo me ha permitido conocer dicho arte, descubrir que sus límites no acaban en el pop, tener amigos virtuosos en distintos instrumentos, esperar con impaciencia ese final de curso en el que mi pequeño Manuel dará su primer concierto de piano... He aprendido a sentirla, a respetarla y -como a todo lo que amas- a defenderla.
Bajo esta premisa, descubro con sorpresa e indignación que la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de León han llegado a un pacto, "sin consultar a ninguno de los usuarios y sin informes técnicos que lo avalen", para trasladar el Conservatorio Profesional de Música de León a las entrañas del campo de fútbol, en unas instalaciones que no reúnen las condiciones apropiadas (inicialmente estaban pensadas para oficinas) y en una zona retirada de la ciudad (los comerciantes del rastro no quieren trasladarse allí por lo alejado del lugar). Los cuatro millones de euros que se han presupuestado para corregir sus deficiencias parecen más un mal remiendo que una buena solución.
El acuerdo previo para construir un nuevo Conservatorio en un entorno educativo, próximo al campus universitario y a un instituto, diseñado con las debidas necesidades estructurales y acústicas que tal edificio requeriría, ha quedado en papel mojado.
Todos los amigos relacionados con la Música a los que he consultado (profesionales y docentes de primer nivel en muchos casos, además de algunos padres de sus alumnos) califican esa decisión de despropósito. A ellos que son quienes saben, nadie les ha preguntado, con el riesgo de daño irreparable que tales arbitrariedades podrían causar a nuestra Cultura (al igual que ha sucedido en otros ámbitos que conozco, como el de la Investigación). Y eso es lo peor: por muy político que uno sea resulta difícil que tome decisiones acertadas si no conoce aquello sobre lo que está decidiendo. Porque, tristemente, lo de amarlo ya lo damos por perdido.

martes, 12 de abril de 2016

Mi diccionario particular

A petición de otra amiga lectora, reproduzco este diccionario particular, incluido en mi libro Nanas para un principito. Porque no tengo ninguna duda: las palabras que se limpian, brillan más... Si bien solo las equivocadas suelen decir la verdad.

Abanico: Aire sin luz.
Anticipación: Sexto sentido de los ganadores.
Crisis: Situación en la que cada novedad es peor que la anterior.
Culpable: Lo primero que buscan las personas cuando tienen un problema. Lo segundo es una solución.
Diplomacia: Habilidad consistente en decir cortésmente lo que se piensa, aunque no se piense cortésmente lo que se diga.
Estrés: Exposición prolongada a la vida al límite.
Felicidad: Estado de ánimo que solo se alcanza cuando no tenemos miedos.
Hipótesis: Idea que en teoría pretendemos demostrar y que en la práctica necesitamos imponer.
Imaginar: Forma verbal de la palabra magia.
Ironía: Amor con sentido del humor.
Leer: Forma verbal de la palabra elección.
Lo siento: Combinación de palabras que únicamente dicen quienes son muy valientes, muy maduros o muy sensibles.
Magia: Arte de crear ilusiones. No confundir con Amor, que es el arte de vivirlas.
Ostentación: Habilidad para demostrar que eres el más rápido, el más fuerte o el más alto, aun a riesgo de que alguien pueda creer que es verdad.
Perro: Dícese del mejor amigo del hombre, siempre que este no vaya en bicicleta.
Rencor: Sentimiento de pena o tristeza que produce la ausencia de las personas odiadas.
Saludar: Forma verbal de la palabra salud.
Valentía: Virtud en peligro de extinción consistente en asumir debilidades sin proyectar culpas.

lunes, 11 de abril de 2016

De libros y reality shows

Leo con estupor que Belén Esteban (Sálvame) vende en España tres veces más libros que el Nobel Mario Vargas Llosa... Que el bestseller Querida mamá, de Julián Contreras Ordóñez (Gran Hermano VIP), batió récords de ventas durante su primera semana en el mercado, además de inspirar una serie para televisión... Que Carlos Navarro, El yoyas (Gran Hermano-2), atesora una cobertura mediática en las presentaciones de sus poemarios notablemente superior a la de los mejores poetas/poetisas del país... Y que animada por tal éxito, su mujer (también concursante del mismo reality show) acaba de apuntarse a dicha aventura literaria con otra publicación.
Leo con sorpresa que este fin de semana ha habido manifestaciones mediáticas en Reikiavik (en protesta contra su primer ministro, tras la aparición de su nombre en los llamados papeles de Pánama), en Londres (por motivos similares, respecto a Cameron), París (contra el proyecto de ley de su reforma laboral), Atenas (contra la reforma de pensiones)... Y en Madrid, con partidarios de los dos finalistas de la actual edición de Gran Hermano VIP: el Batallón carlista a favor del expresentador Carlos Lozano, y el frente Laura somos todos pro Laura Matamoros, hija de un colaborador de otro reality de la misma cadena.
Para reflexionar... Y es que, ciertamente, hay lecturas ante las que sobra cualquier comentario.

viernes, 8 de abril de 2016

Los Secretos de mi vida

La banda sonora de mi vida está llena de Secretos. Confieso que una noche quise beber hasta perder el control, que algunas mañanas ando perdido por el bulevar de los sueños rotos para luego reencontrarme en la calle del olvido... Quizá sea que soy culpable de algo que desconozco o simplemente que soy como dos. Que lo mismo me enamoran unos ojos de perdida que tus ojos de gata... que a escondidas, sobre un vidrio mojado, escribí tu nombre... que cada vez que yo te miro, aunque no estés ni te vea, me siento a tu lado solo por verte sonreír.
Cada atardecer te doy las gracias por elegirme, mientras digo con orgullo adiós tristeza. Porque no sé si sabes, amiga mala suerte, que ya me olvidé de ti.
Será por todo ello que ayer recibí un regalo muy especial: las entradas para ese concierto acústico de un "grupo de música pop rock", que fue, es y será siempre parte de mis vivencias. Resultó una auténtica sorpresa, pues no supe nada hasta media hora antes de que empezase. De hecho, supuse que me lo perdería dado que el auditorio estaba lleno. Pero no... Afortunadamente, su secreto eran también mis Secretos.

lunes, 4 de abril de 2016

El sabor del mar

El pasado 2 de abril, coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil, la editora Vera Kújareva tuvo el detalle de contar mi cuento El sabor del mar, incluido en mi obra Nanas para un Principito, en la Maratón de Cuentos celebrada con tal motivo en la Biblioteca Pública de Vallecas.
A sabiendas de lo bien que salió todo y junto a mi más sincero agradecimiento, comparto unas líneas del mismo:

"Cuentan que cuentan que me contaron, que al principio de los tiempos el mar estaba hecho con vino. De ahí su color rojizo de aquel entonces, de ahí que las Sardinas dijeran tonterías y anduviesen dando tumbos, pues siempre acababan con una copa de más.
Ante las quejas de los Atunes, cansados de dar positivo en tantísimos controles de alcoholemia, la Madre Naturaleza decidió hacer un cambio. De manera que a partir de entonces ese mar estaría formado a base de café. De ahí el color negruzco de aquel periodo, de ahí que las Doradas danzasen desveladas bajo los efectos de tanta cafeína. No obstante, a más de uno le parecía desacertada aquella decisión.
- ¡De leche! –pensó la Naturaleza tras escuchar el lamento de una Lubina-. Haré que el mar tenga leche para disfrute de los peces.
De ahí el color blanquecino de aquellos años, de ahí que las Ballenas engordasen tanto con un alimento tan rico en proteínas.
Sin embargo, ni siquiera entonces hubo consenso. A las Gambas les resultaba difícil conservar su figura y a los crustáceos no acabó de gustarles semejante sabor.
Por ello, cansada de tanto ajuste y reajuste, la Madre Naturaleza tomó una decisión definitiva: que entre el millar de animales que habitan los océanos escogieran su composición. Únicamente les advirtió que meditaran muy bien lo que fuesen a elegir, pues aquello que saliera de tal acto perviviría para siempre...".