sábado, 9 de agosto de 2008

El gerundio del verbo contar


Hola y bienvenidos a este blog:

Soy Manuel Cortés Blanco y empezaré haciendo una confesión: no importa que me llamen cuentista. Que a mi condición de médico, psicólogo y escritor se añada sin complejos esta última cualidad. Cuentista porque utilizo el cuento para expresar lo que siento (tanto en los libros como en mis sesiones de cuentacuentos), por pertenecer a una familia que se cuenta las cosas, porque ingenio e imaginación cuentan siempre en mis relatos. Y así procuro manifestarlo en aquellos eventos en los que participo: Maratón de los Cuentos (Guadalajara, 2007), Salón Internacional del Libro Iberoamericano (Gijón, 2007), Fiesta Literaria Irreverentes (Elche, 2008) o Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil “Leer León” (León, 2008), entre otros.
Pese a habérseme comparado con distintos autores en este género, prefiero cultivar un estilo propio: cercanía en las historias, una sencillez cuidada, cierta ironía que invite a pensar. Y quizá el más importante: convertir lo cotidiano en literatura.
Entrañable, original, reflexiva y risueña, son algunos de los calificativos que han dicho de mi obra. Aunque yo, con independencia de las etiquetas, prefiera ser fiel a esta máxima: escribir para compartir.
Con mi primer libro El amor azul marino (Editorial Amares) obtuve el Premio Literario Amares 2005. Soy también autor de Cartas para un país sin magia (Ediciones Irreverentes). Con el último, Mi planeta de chocolate, he sido finalista del II Premio Internacional Vivendia de Relato 2008.
Deciros que colaboro con la ONG Aldeas Infantiles SOS, a la que he cedido los derechos de autor de mi obra. Y que podéis encontrar algún otro enlace mío en las siguientes direcciones electrónicas:

Nos seguimos leyendo, nos seguimos contando.