Enmarcada dentro de la Semana Mundial de la Lactancia Materna -coincidente con la 40ª semana del año, cual si fuera un embarazo a término-, bajo la organización del Grupo Promotor de la Lactancia Materna de la Provincia de León y la coordinación de la Sección de Promoción de la Salud del Servicio Territorial de Sanidad de León, ayer realicé una sesión de cuentacuentos en el parque del Temple de Ponferrada con la que rellené ese saquito que siempre llevo conmigo y al que el diccionario le llama Experiencia. Porque es cierto que allí ofrecí mis cuentos, pero a cambio el público asistente me dio -como en tantas otras ocasiones- muchísimo más.
De las personas que integran la Asociación Prolactancia Materna Lactabebé Bierzo aprendí de su labor y del esfuerzo que realizan en favor de la crianza natural, incluso a horas ciertamente intempestivas... De las compañeras del Centro de Salud Ponferrada II me quedé con su hospitalidad, su cercanía y esa sala de espera que explica a colores las pautas para crecer en salud... Y de los oyentes, niños todos de entre cero y cien años, me traje su cariño. Unos acertaron que el Ornitorrinco es el único mamífero que pone huevos, otros adivinaron que el Murciélago es de entre ellos el único que puede volar... Y aunque ninguno supiera que América es el único continente que linda con los dos polos terrestres, todos estuvimos de acuerdo en los múltiples beneficios que ofrece la lactancia materna.
sábado, 5 de octubre de 2019
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