Nuestro Principito sigue creciendo y no solo como persona. Lo hace también en esas dos pasiones que le cautivan: jugar al Balonmano y tocar el Trombón. Y así, si en el mes de julio asistía en Vegacervera al campamento Juanín García dedicado a tal deporte, en estos días de agosto anda metido entre notas en el 15º Curso Musical de Valencia de Don Juan. Allá viene realizando clases individuales, orquesta, banda y taller de coro, además de actividades de percusión corporal o sensibilización musical. Lo está pasando en grande... Y más a partir de mañana jueves cuando empiece a intervenir en los conciertos. En principio serán en el municipio de Gordoncillo, en el Monasterio de Sandoval, en la propia Valencia de Don Juan... Aunque para mí no sea su primera actuación ante público, me da que en el graderío estaré más nervioso que él.
En cualquiera de los casos, sea con un balón o ante alguna partitura, me encanta sentirle así: disfrutando intensamente con lo que hace. De hecho, estamos urdiendo en familia otra propuesta para el futuro que combinase sus acordes con mis cuentos... aunque de momento no podamos decir más. Y es que, mientras seguimos creciendo, este será nuestro último secreto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario